domingo, 30 de junio de 2013

Nothing is black or white

Un año más pasando el día. Festivo para muchos por distintas razones. Como dijo un gran gran hombre que nos dejó hace muy poco: "Nothing is black or white". Esa frase sirve para tantos aspectos... Yo prefiero quizá el gris, porque el término medio a veces es el más correcto.. aunque quizá... lo mejor sea multicolor. Hay días que lo ves todo negro, en que nada parece que va a hacerte cambiar pero puede que de repente alguien te sorprenda y coloree un poco tu oscuridad. No hace falta mucho.. una llamada... una sonrisa... una broma... un detalle.. porque no siempre se necesitan grandes cosas para iluminar. Llegan días en que ni uno mismo se aguanta. Estás irritado, cansado, decepcionado.. irreconocible. Incluso te cuestionas si hasta puede ser un poco de locura. En cambio, al día siguiente o en sucesivos, la cosa cambia, sin saber porqué y ahora lo ves todo de otro color. Muchos dicen rosa... yo no soy muy partidaria de ese color, todo hay que decirlo. La suerte te sonríe. El universo parece haberse puesto de acuerdo para que las cosas salgan bien, como tú quieres. Inesperadamente. Y vuelves a sonreír y dejas como recuerdo ese día oscuro. La vida es como una montaña rusa: a veces estás arriba y otras abajo. Lo importante es bajarse y volverse a subir. Volver a experimentar, a sentir, a aprender y también a enseñar. Cada color dicen tiene un significado... lo desconozco. Lo que si sé que cada persona tiene no su significado en sí, pero si su participación en tu vida. Todos dejan su huella. Unos dejan colores cálidos y otros fríos, pero todos necesarios para esa bandera multicolor. Y al igual que con las personas, con todo. La pregunta es: "¿Cuál es tu color? o ¿Eres más de blanco y negro?" "The art of diversity"

miércoles, 19 de junio de 2013

Merece la pena o no...

Hoy es uno de esos días que me levanto y no dejo de pensar. Mi mente no quiere descanso mas cuando empieza tu jornada de trabajo y ves que hoy va a ser un día muy muy duro, muy largo. Cuando llevas cinco días trabajando que no ves que llegue el día de librar. Que además apenas has podido parar para comer. Súmale que ya se empieza a notar el calor, el verano ha hecho su acto de presencia y promete no marcharse en mucho tiempo. Consecuencia más trabajo, más calor, menos descanso.. Empiezas a saber más de tus amigos, sus planes... sus planes sin ti. Y tras ese día interminable de trabajo te dicen cosas como que si no es contigo no se independizan. Que te echan más de menos de lo que te pensabas. Cuando te dicen que llevan tiempo guardando tu regalo de cumpleaños, ese que no vas a celebrar con ellos. Darte cuenta que mañana es el cumpleaños de tu madre y va a ser el primero que no pases a su lado. Saber que tu abuela acribilla a mensajes a tu madre y tu tía cada vez que sabe que están hablando contigo... Cosas que haces que te plantees seriamente si merece la pena estar o no tan lejos, viviendo tu aventura. En cambio te sigues levantando con ganas de ver otra vez como se tiñe el cielo de color al salir el sol. Al saber que poco a poco vas sacando de tu mente cosas que necesitabas olvidar. Alegrarte porque cada vez notas más lejos los fantasmas. AL saber que cada día está más cerca el poder decirte: ! Lo conseguí! Empezar a notar otra vez ese dolor en mi espalda y recibir un mensaje de buenos días, ese que sólo tu me mandas. Good morning princess! Y sonreír al ver la foto que me has adjuntado... Esas cosillas que hacen que si pudiera.. viviria contigo. No haber podido ni sentarme hasta las cinco de la tarde y que veas mi puntito verde y me digas... !que ganas tengo de verte! Que aquí me aburro mucho y encima hace frío! Cosas que hacen que sepa que son pocas y quizá los conozca de hace poco pero se que mis mejores amigas están ahí, más lejos o más cerca pero siempre. Tres ejemplos, tres personas, tres personalidades... mis tres complementos. Así que... ¿Merece o no la pena?

viernes, 14 de junio de 2013

Idas y venidas

Sabes que al tomar una decisión tendrás consecuencias. Sabes que si decides irte tendrás bienvenidas, pero también despedidas. Que un día te levantarás y verás que todo ha cambiado, que tú has cambiado. No quiere decir que sea malo, sólo que es un proceso de adaptación al medio, a las circunstancias. Día a día vas cogiendo confianza. Conociendo a gente, abriéndote, intentando ser tú misma. Y así puede que pasen semanas, meses. Pero entonces llega ese otro día, el que supiste que llegaría incluso antes de marcharte, pero para el que creo nunca se está lo suficientemente preparado. La despedida. Un día, varios, seguirás acordándote de esos momentos compartidos, risas, ratos malos... pero al fin y al cabo todo recuerdos, buenos recuerdos. Y te invade de nuevo el malestar. Malestar por pensar en que sea la primera de muchas. En pensar que con cierta gente nunca llegue ese momento. Que te da miedo que después de ese adiós, o un hasta luego, el cual prefiero, no haya ningún, cómo te va, me acuerdo de ti, espero verte pronto o un simple hola. Y luego piensas que todo sucede por una razón y que si no hay una próxima vez, será porque no era importante. Cierras los ojos, cuentas hasta cien y sigues con nuevas energías. Energías que te dan la gente que te rodea, recién conocida o de toda la vida, quizá las dos cosas. Energía que te da el poder decir, tengo un trabajo. Energía al dar una vuelta por tu presente y sonreír. Energías de leer un mensaje con "Good morning princess" o "Buenos días fea!". Los dos iguales, los dos diferentes, los dos importantes. Energía de oír una canción y saberte la letra. De empezar a cantar sin importarte quién esté a tu lado. Energías de recordar que cada día que pasa tenemos más cosas en común. Energía al decirme que hoy te has acordado de mí. Energía de conseguir un punto que antes siempre perdías. Energía al tener la posibilidad de seguir haciendo hobbys que tenías olvidados y formaban parte de tí. Que aún forman parte de ti, que te han hecho ser como eres ahora. Energía al saber que a pesar de todo, mañana puede ser mejor.

viernes, 7 de junio de 2013

Levantarse y...

Levantarse y saber que va a ser un dia largo e interesante. De esos que llevas esperando tantos dias que cuando llega no quieres que termine. Levantarme y saber que te voy a volver a ver y darte un abrazo. Levantarme y tener la sensación de que vas a tener noticias, sin saber de qué tipo,pero lo sabes. Levantarme tras una noche alternativa. Esos planes que siempre te apetecen y nunca tienes la oportunidad, pero esa noche si, perfecta, corta, intensa, recordable. Levantarme pensando que esa noche he estado cerca tuyo, aunque haya sido en sueños. Pensar que algún día se haga realidad. Levantarme y pensar que pasa el tiempo tan deprisa que apenas te das cuenta de como han cambiado las cosas. De que yo misma he cambiado. Con más inquietudes, más ideas, nuevos retos a la vista... quizá más madura. Levantarme y pisar con el pie derecho, empezando bien la jornada. Levantarme y desear que hoy sea un gran día, para mí pero sobretodo para ti. Tanto tiempo... tantos pensamientos... tantas ilusiones...tantas palabras...tantas lágrimas... es la hora. Levantarme y recordar porqué estoy aquí. Sonreír porque lo estoy consiguiendo. Levantarme y reír porque casi me caigo de la cama por apenas haber dormido. Sonreír aún más al saber que el día que comienza va a ser aún peor, pero por el contrario va a ser uno de esos días que recordarás por mucho tiempo. Aunque en el fondo siempre falte algo, lo será. Levantarme sabiendo que la confianza se gana día a día y es el comienzo para que crezca y dure una amistad. Levantarme tranquila porque las dos estamos sembrando y recogiendo. Respirar porque tu piensas lo mismo que yo. Levantarme y estar segura de que ni la distancia puede impedirme nada. Quizá ponga barreras, pero nunca serán infranqueables. "Imposible is nothing". Levantarme con buen humor y poner mi música preferida. Levantarme y reírme del tiempo al mirar el reloj, porque hoy nada puede hacerme cambiar de idea. Es un gran día. Todo va a salir bien.