miércoles, 30 de abril de 2014

La misma luna

Si tuvieras que acordarte de los buenos momentos y pensar en quién piensas al vivirlos. ¿Quién te viene a la cabeza?
Digo en los buenos momentos porque para mi, siempre son primero los buenos momentos, pero supongo que serán la misma personas las que vengan a la mente cuando se trata de momentos menos buenos. ¿Qué hacer cuando tienes la necesidad de que sean participes de lo que estás viviendo, de lo que estás viendo y sintiendo en ese momento, aun cuando no se encuentran a tu lado? ¿Cómo explicar que te da un vuelco el corazón cuando son esas mismas personas las que dan señales de vida en el momento menos esperado o en el momento más oportuno sin tener esperanza de que así sea?
¿Qué pensar cuando sigue pasando el tiempo y siguen ahí aunque no sea de la forma que quisieras? Son esas personas las que forman parte de ti. Las que habitan en tu corazón. Pueden ser o no familia, amigos o gente que pasó por tu vida. Pero todos ellos tienen algo en común: han dejado una huella especial en tu vida. Difícil de borrar, difícil de sustituir, de reemplazar.
La sensación de saber que no sólo tú te acuerdas de ellos. La sensación de que pregunten por ti, con esas palabras únicas de cariño, con esas palabras que identifican a cada uno, con esos audios imposibles de entender, con esas bromas que son nuestras y de nadie más.  La sensación de saber qué es el amor en cada una de sus formas, las que has tenido la suerte de vivir hasta ahora, ya quedará tiempo para muchas más.
Pensar que esa peque ya se está haciendo mayor, que necesita nuevos retos, que para todo esto sigo pensando en vosotros, esas mismas personas, las que forman parte de mí.
Mirar al cielo y pensar que, a pesar de la distancia o las diferencias, estamos mirando la misma luna.

miércoles, 23 de abril de 2014

Simplemente e indudablemente...hoy

Quiero empezar acordándome de que un día como hoy, se celebra el Día de la Tierra, la madre Naturaleza que tanto maltratamos y que tanto nos da. Cuidadla tanto como podáis.
Y no puedo evitar acordarme de ti hoy. El día del libro, de la cultura, de ese arte que forma parte de nuestra vida. De unos más que de otros, estoy de acuerdo, imprescindible en la mía. No puedo evitar pensar que hubiera sido grande que nos dejaras un día como hoy, como los grandes y a lo grande. Pero luego pienso, tú en ti mismo, ya eras grande y por eso te merecías un día, para ti sólo. Posiblemente hoy, un 23 de Abril, sea uno de los días más festivos y especiales para mí en todo el año.
Siempre lo he vivido como festivo, por celebrar el día de Castilla y León, comunidad que no me vió nacer pero me ha visto crecer y ser quien soy. Quien me ha dado tanto y me ha enseñado tanto. También hoy festivo para los aragoneses, no todo va a ser castellano, aunque hubo una época que estuviéramos más unidos que una pareja bienavenida. .
Para que nadie se enfade, por supuesto, también felicito a todos los Jorges y Jordis, siendo especial en Cataluña, por esa tradición que me encanta de la rosa y el libro, combinación perfecta. Es un día en que por ser el Día del Libro, sacas tiempo para leer unas líneas, para comprar un ejemplar, para regalar una obra, para recordar ese que te hizo disfrutar tanto. Qué mejor que hoy para leer, no hay escusas.
El día del libro...cómo me gusta. Siempre me imagino leyendo este día, el año pasado lo hice, sentada en la arena, rodeada de un mar precioso. Este año, he cambiado de escenario, pero no menos importante. La tranquilidad de mi casa. He cogido el libro de mi mesilla, mi compañero de noches y, acompañado de un té, he disfrutado de un tiempo incalculable. Imaginando personajes, viviendo la aventura, deseando pasar página y saber cómo continúa. Siempre me he imaginado que llegará un día en que alguien sea ese yo, que saca un tiempo y empieza a leer unas páginas de un nuevo libro por descubrir....mi libro.

viernes, 18 de abril de 2014

Para Gabo

Hoy no puedo evitar sentir tristeza. Sentir que algo se ha marchitado dentro de mi. Se ha ido uno de los grandes, Gabriel García Márquez, "Gabo". Del que tanto he aprendido. Quién comenzó a verme de lectora. El que me dio energías para ir más allá y me dio las primeras palabras que escribí en un papel. El que ha sido un ejemplo. No se si para mí fue más grande el escritor o el contador de historias.

Pero a la vez no puedo estar triste, porque siempre tengo presente una de sus frases, una que me ha acompañado y la hice mía desde que la conocí: "Nunca dejes de sonreír, ni siquiera cuando estés triste, porque nunca sabes quién se puede enamorar de tu sonrisa". Al fin y al cabo, " ninguna persona merece tus lágrimas y quien se las merezca, no te hará llorar"

Contigo he aprendido que "No hay medicina que cure lo que no cura la felicidad"; que "La peor forma de extrañar a alguien es estar sentado a su lado y saber que nunca lo podrás tener"; que "Ningún lugar en la vida es más triste que una cama vacía".
Pero también me enseñaste que "Sólo porque alguien no te ame como tú quieres, no significa que no te ame con todo su ser"; que he podido comprobar que " Cuando un recién nacido aprieta con su pequeño puño, por primera vez, el dedo de su padre, lo tiene atrapado por siempre"

Con respecto al amor, eso que para mí es lo que mueve el mundo, a pesar del dinero y el egoísmo de ciertos personajes, que opino simplemente no han sabido amar...puesto que "Un hombre sólo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo cuando ha de ayudarle a levantarse". Saber que hay que "Darle el valor a las cosas, no por lo que valen, sino por lo que significan", aunque muchas veces se nos olvide. " Si quieres ser amado, ama tú"

Y "No llores porque ya se terminó, sonríe porque sucedió" Toda persona deja huellas en nosotros, nos enseña y forma parte de quién somos y seremos. Recuerda  que "Puedes ser solamente una persona para el mundo, pero para una persona tú eres el mundo", aunque aún no haya aparecido en tu vida.. No desaproveches el tiempo, " No pases el tiempo con alguien que no esté dispuesto a pasarlo contigo".
Sino, piensa en los amigos, "El amor se hace más grande y noble en la calamidad". Muchos han pasado por tu vida y pocos permanecen en ella; son muy pocos los verdaderos amigos. "Un verdadero amigo en quien te toma de la mano y te toca el corazón". Ten siempre en cuenta, no sólo para los demás, sino para tí mismo, que "También el amor se aprende".

Contigo he podido expresar sentimientos que son difíciles decir con palabras. He sentido cosas que todos hemos sentido alguna vez y si no tocará sentir. Quizá  tengas mucho que ver en mi forma de escribir, en sacar lo que según muchos tenía escondido. Y como no podía ser, te cojo prestado algunas perlas de ese poder que mueve el mundo llamado "amor".

" Si supiera que esta fuera la última vez que te vea salir por la puerta, te daría un abrazo, un beso y te llamaría de nuevo para darte más. Si supiera que esta fuera la última vez que voy a oír tu voz, grabaría cada una de tus palabras para poder oírlas una y otra vez indefinidamente. Si supiera que estos son los últimos minutos que te veo diría te quiero y no asumiría, tontamente, que ya lo sabes. Siempre hay un mañana y la vida nos da otra oportunidad para hacer las cosas bien, pero por si me equivoco y hoy es todo lo que nos queda, me gustaría decirte cuanto te quiero, que nunca te olvidaré"

"La vida es la cosa mejor que se ha inventado", y si alguna vez llega el momento de morir, espero no tener que recordar esa frase tuya "Lo único que me duele de morir es que no sea de amor"

Descansa en paz "Gabo"- Recordar es fácil para quien tiene memoria. Olvidar es difícil para quien tiene corazón





jueves, 10 de abril de 2014

Nuevas energías

A medida que pasa el tiempo necesitamos nuevas energías para el día a día. Quizá esas energías vengan de la manera menos esperada. Tener un mensaje suyo al llegar a casa. Espero que todo esté bien aunque haga tiempo que no hablamos. Y se preocupa cuando le cuentas las cosas buenas y las no tan buenas. Se divierte contigo comentando jugadas que a ninguno de los dos nos interesan.
Una sonrisa y un guiño, suficientes para decirnos todo a la salida del trabajo.Cinco minutos de un tiempo que ambos sabemos, podríamos estar durmiendo y nunca diríamos nada al respecto.
Oír cuatro palabras que nunca llegan, " hoy me siento mejor". Logra quitarte un peso de encima y ver que, una vez más, todo cambia y que después de la tormenta siempre sale el sol. Recordar esa foto, amuleto o momento que hace que te cambie la cara. Que mires la vida desde una perspectiva menos real y cruel, que incluso, hace que vivas con la sensación de estar haciendo las cosas bien y de poder seguir haciéndolas. Sentir que nunca te sientes tan vivo y feliz, cuando consigues que el mundo sea un poco mejor para la gente que te importa. Que te hagan sentir un poquito más importante que el resto. Que te feliciten por ser simplemente tú, aunque aún sigas buscando el porqué.
Que te rodees de gente por casualidad, que te incitan a tener nuevos retos. Retos que muy posiblemente puedas lograr en un corto periodo de tiempo y darte cuenta que nunca vas a tener otra ocasión mejor que ésta. Pensar en intentar repetir momentos en los que eras feliz y que difícilmente se puedan repetir una vez más. Luchar con el destino para que las cosas cambien porque no te gusta como están ahora. Querer gritar desde lo alto de la colina que tanto te ha costado subir y respirar profundamente ese aire embriagador de sueños, palabras, ecos, esperanzas y sentimientos guardados y nuevos.
Llegar al final del día y ver que las baterías están agotadas. Que ese mensaje también te recuerda que no estás ahí. Que esa sonrisa no puede liberar ni solucionar la verdad. Que ese peso de encima puede ser más pesado en unos días. Que mañana puedes cometer el error más grande de tu corta vida. Que te levantes y simplemente, te cueste dar un paso adelante. Que no tengas ganas de luchar contracorriente y sólo quieras dejarte llevar. Que llegará el día, en que no reconozcas nada de lo que te rodea y toque empezar otra vez de cero
Mañana quizá, las energías son nuevas y las pilas estén cargadas, de esas que duran.