lunes, 7 de julio de 2014

Las cosas con corazón son las que se recuerdan

Hace exactamente un mes decidí apostar por ti. Por ese yo que siempre está escondido y que con el paso del tiempo he aprendido a que vea el sol, sin esconderse. Decidí que era más importante aprovechar el momento que arrepentirse del "y si"... del "quizá"...del "mañana", del "seguro que es un no", de ni siquiera intentarlo... Fue una decisión meditada y necesaria. Las cosas no salieron en un principio como en mi interior quería, pero me ha servido creo más así, que de otra manera.

Me ha servido para saber que puedo luchar por más cosas de las que pienso. Que puedo con más situaciones que antes o a las que nunca me había enfrentado. Que cuando una ventana se cierra hay que buscar la manera de abrir otra, o una puerta. La manera de buscar ese nuevo aire fresco que nos de nuevas ideas, nuevas metas y nuevos retos. Porque desde que di ese paso, también me ha servido para conocerte un poquito más, alejarme lo necesario para que tú estés mejor y para que, sobre todo yo, me plantee más cosas que antes tu idea me tapaba. Gracias S.

Desde entonces no sólo he crecido un año, he crecido con experiencias de años acumuladas en minutos.
Me ha servido para conocer a gente que aún tiene mucho que dar, unas que tenía ya cerca y otras que se han acercado más. Me ha servido para estar más segura de lo que quiero en un futuro próximo, a pesar de los riesgos y las consecuencias. A levantarme cada mañana con la idea firme de que si trabajo duro algún día lo conseguiré. A tener conversaciones que me dan alas para trabajar aún más duro si hay posibilidades y apoyos detrás. Me ha servido para saber aún más quién cree en mí, quién está ahí y por quién merece la pena luchar. Por quién merece la pena no dormir y compartir aun cuando se está enferma. Por quién dar un abrazo, cambiar tus planes y decidir quedarte. Incluso por quién llorar o también enfadarse. Porque son quienes realmente importan.

 Muchos pasan por tu vida. Muchos dejarán huellas, casi imperceptibles, más o menos profundas que siempre te dejarán un recuerdo, una experiencia que aprender. Pero yo prefiero pensar en esas personas que dejarán huellas para siempre. Esas con las que cuentas en tus planes. Las que quieres que compartan tu presente, tu futuro. Por las que siempre tienes unas palabras de ánimo, una sonrisa o tiempo para un café. Las que te ayudan a ver cuando está todo a oscuras. Las que te pegan una voz cuando ni tú te estás oyendo. Cuando te levantan de la cama y te enseñan que hay más cuando das un paso adelante.
Un mes que he aprendido a vivir contigo y sin ti. A hacerme a la idea de que no hay una vida juntos pero que siempre estaré ahí si me necesitas. Que el destino nos ha juntado en esta aventura pero que en algún momento nos separará para continuar nuestros propios capítulos. Y claro que se echa de menos. Se echa de menos todo lo que se ha conocido, lo que se necesita y está lejos...pero el mundo es un constante cambio, y hasta eso cambia, siempre llegará alguien que tome tu lugar o simplemente, se quede a tu lado cuando esté escrito. Hay que intentar vivir lo que uno quiere, tener experiencias aunque duelan, porque en algún momento, puede ser la definitiva. Y me alegraré cuando a todos los que han dejado su huella en mí, les pase.

Unos dicen que el ser humano es malo por naturaleza, otros lo contrario. Otros que sólo son lo que conocen. Yo prefiero pensar que todos somos distintos, cada uno sus experiencias y su forma de pensar. Todas válidas si hay respeto y cariño.
Quizá se pasen malas épocas, días difíciles, pero algún día, con esfuerzo todo pasa y se ven los resultados. He aprendido que las oportunidades se buscan y que mañana será otro día. Así que, ahí voy al trabajo duro, aunque muchos no lo entiendan, persigue tus sueños, da lo mejor de ti y haz lo que sientas. Las cosas con corazón son las que se recuerdan. Huye de las personas negativas. De las que no persiguen sus sueños y te van inculcando que tú tampoco puedes. Cada uno es dueño de sí mismo y sólo tú sabes hasta donde llegar. Sólo tú vives tu vida, no vivas la de nadie ni dejes que nadie viva tu vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario